¡Saludos domadores/as!
Hacía mucho, mucho tiempo que no les traía una reseña sobre algún cómic. Y no es que sea una excusa, pero voy un poco lenta leyéndolos y aún no sé muy bien con cuál empezar .
¡Eso sí! Ya he podido ampliar un poco mi mini-colección e irme introduciendo en este nuevo y extenso mundo.
Continúo mi lectura con Batman. En este caso con uno de los personajes más carismáticos y ambiguos que podemos encontrar por estos lares. Se trata de la obra La Broma Asesina, un cómic dedicado a la historia del Joker, el gran enemigo y villano de toda la historia de Batman.
Muchos saben, y si no se los cuento, que estoy hiper-enganchada a la serie Gotham, la cual trata sobre los personajes del mundo DC antes del nacimiento de «Batman» (que no es lo mismo que el de Bruce Wayne). Pues bien, cuento esto porque el Joker es uno de los personajes que más curiosidad nos genera o por lo menos a mí me interesa conocerle y saber por qué está tan desequilibrado. Sin embargo Gotham va a otro ritmo. Así que cuando descubrí que había un cómic sobre esto, no lo dudé y me adentré en su historia.
Bueno, mejor me dejo de rollos y vamos a empezar con la reseña.
Espero que me disculpen si ven algún cambio en la estética de la entrada. Estoy probando diferentes métodos hasta dar con uno que sea más estructurado y agradable a la vista.
Título: Batman. La Broma Asesina
Saga: Grandes autores de Batman
Autores:
– Guionista: Alan Moore
– Dibujante: Brian Bolland
– Traductor: Rául Sastre
Editorial: ECC Ediciones
Precio: 7,95€
El Joker ha vuelto a escapar del Asilo Arkham. De nuevo, Batman, debe buscarlo, detenerlo y entregarlo a la justicia, pero su archienemigo por excelencia tiene un plan y quiere ponerlo en práctica: según su teoría cualquier persona necesita un único mal día para volverse loco, y para demostrar su tesis ha escogido a Jim Gordon como su conejillo de Indias particular.
Nos adentramos en un mundo oscuro. Un mundo extraño, siniestro, en el que reina lo absurdo. Estamos bajo el embrujo del Joker.
Esta historia no es el típico cómic donde reina el típico «tira y afloja» entre Batman y su eterno rival. Aquí el Joker es el auténtico protagonista y nuestro murciélago enmascarado es un secundario que va tras sus pasos.
La Broma Asesina es el famoso cómic escrito por Alan Moore en 1988 e ilustrado por Brian Bolland. Se trata de una historia corta, de tan sólo 64 páginas. El dibujo no es muy pintoresco ni peca de antiguo sino todo lo contrario. No soy experta en el mundo del cómic, y no puedo compararlo con otros, pero sí que me atrevería a decir que el dibujo de Brian Bolland da un cambio muy brusco a la «imagen» típica de los cómics de aquella época.
¿No les suena esta pose?
Bajo la pluma de Alan Moore, al cual le estoy cogiendo un cariño inmenso, nos encontramos con un Joker nuevo y a la vez uno ya conocido. No sé cómo explicarlo, pues este personaje tan carismático y raro es como es. Sin embargo, Moore le ha dado un nuevo estilo que atrapa.
Leyendo otras opiniones, de personas mucho más expertas en la materia, esta obra supone un punto de inflexión en cuanto al personaje. Viéndose reflejado posteriormente en la famosa obra de Christopher Nolan El Caballero Oscuro y cómo Heath Legder lo inmortalizaría con su estupenda interpretación. Una adopción fiel a este personaje dejando claro la fuerte influencia de La Broma Asesina en las películas recientes de Batman.
El Orden y el Caos, del Bien y el Mal
Alan Moore nos muestra al maestro del engaño, al despiadado asesino con un origen humano, el cual nunca había sido abordado en los cómics. Y lo hace de la manera más correcta: mediante diferentes flashbacks formando parte del argumento. Sin embargo se mantiene fiel a la esencia de este «guason«, afirmando él mismo no estar completamente seguro de sus propios recuerdos.
A veces lo recuerdo de una forma, a veces de otra.
Es mejor tener un pasado en de donde poder elegir en vez de uno solo, ¿No te parece?
Portada censurada en EEUU
En resumen, La Broma Asesina es una obra cargada de sentimiento, pasión, odio y crueldad. Llena de un sin sentido, una incoherencia que es reflejada en el mismísimo personaje, donde queda demostrado la existencia de un círculo vicioso en el que se encuentran Batman y el Joker respecto a los papeles que se ven obligados a interpretar el uno con el otro. Héroe-Villano, Orden-Caos, Ética-Albedrío…
Y sin embargo, la demostración de que ambos se necesitan el uno al otro, viéndose reflejado en las últimas escenas de La Broma Asesina cuando comparten un «chiste», y riendo juntos saltándose el protocolo establecido, asumiendo que por un momento no están condenados a luchar.
“Había una vez dos tipos en un manicomio y una noche deciden que no quieren seguir viviendo en el psiquiátrico. ¡Y deciden escaparse!
Así que suben al tejado y allí, frente a un estrecho hueco entre dos bloques, ven los edificios de la ciudad recortándose a la luz de la luna contemplando cerca su libertad.
El primer tipo salta sin problemas. Pero su amigo no se atreve. Ya sabes… tiene miedo a caer.
Entonces, el primero tiene una idea y le dice: “¡Ey! Tengo aquí mi linterna. ¡Alumbraré el hueco entre los edificios y podrás caminar sobre el rayo hacía mí!”.
Pero el otro mueve la cabeza y dice: “¿Qué te crees? ¿Que estoy loco? ¡La apagarías cuando estuviese a mitad de camino!
Espero que les haya gustado y no se les haya hecho muy eterna. Ya saben que pueden recomendarme muchos más cómics que en este mundo ando todavía un poco «verde».
Les deseo una feliz, feliz semana llena de lecturas y como siempre les digo: Hasta la próxima,
¡Gordon Primulon, JT!
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